Viedma.- Luego de escuchar variados reclamos de vecinos del barrio Lavalle, más precisamente de la calle 15 a muy pocos metros de la 22, donde hay un “aguantadero”, la edil Fabiana Malpeli realiza las gestiones necesarias para llevar a cabo el cerramiento o derrumbe del lugar.
Tras ocho años de reclamos a distintos funcionarios municipales llevados a cabo por dirigentes barriales de la junta vecinal anterior a la de Susana Salamanca y por la propia Susana Salamanca, finalmente se concretaría la destrucción y el cerramiento del lugar.
La edil del radicalismo, Fabiana Malpeli, junto al abogado del Concejo Deliberante, Ricardo Pridevailo localizaron al dueño del inmueble y le plantearon la situación expuesta por los vecinos, quienes argumentaron en algunos casos que al lugar concurrirían niños de entre 8 y 10 años a drogarse incitados por otros jóvenes de más edad.
A pesar de no haber confirmación oficial sobre las gestiones, un periodista del delitometro pudo confirmar a través de fuentes del entorno deliberativo que durante el transcurso de la semana entrante se firmaría el aval por parte del propietario del lugar, quien le otorgaría el permiso de cerramiento al municipio por no poder costear ese trabajo.
Si todo transcurre como es esperado, los vecinos del barrio Lavalle que esperaron más de 8 años respuestas de funcionarios municipales, finamente podrán estar tranquilos en sus casas sin tener que lidiar con jóvenes drogándose y generando disturbios en los alrededores del lugar.
La policía también había informado que en ese sector se escondían los jóvenes que eran buscados en distintas ocasiones de robo, refugiándose entre esas paredes aprovechando la oscuridad de la noche. También sacaron a varios chicos que se drogaban con poxiran, cigarrillos de marihuana o toman alcohol hasta altas horas de la madrugada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario